"Filmada y montada en formato VHS, TRASH HUMPERS (Frotadores de basura), tiene como protagonistas a un grupo de individuos arrugados y monstruosos que deambulan por los escenarios de una Norteamérica descompuesta, haciendo apología de su condición de “frotadores de basura”. Korine plantea un ejercicio de provocación que remite a las payasadas del clan Jackass, filtradas por la macabra mirada de David Lynch al universo suburbial. La película esboza una poética de la marginación que evoca el recuerdo de las madonnas y proxenetas del primer Pasolini. Con TRASH HUMPERS, Korine compone finalmente una genuina y venenosa oda a los desechos de la sociedad de consumo. Trash Humpers se precipita sobre el espectador como si de una pesadilla hipnótica se tratara: una vivencia de la que se ansía escapar, pero que, al despertar, uno desearía no haber dejado atrás. El responsable del invento es Harmony Korine, quien aquí desplaza las coordenadas de su cine hasta un enclave perdido de la mano de dios; es decir, del cine industrial."
Harmony Korine. Más conocido por Gummo (1997), su impactante debut como
director y por ser el guionista de las películas Kids (1995) y Ken Park (2002) de Larry Clark, Korine es considerado uno de los directores de culto más admirados de la escena independiente norteamericana y mundial, no solo por el público sino por cineastas de la talla de Werner Herzog.
Harmony Korine cuenta con gran número de admiradores en México. Su tercer
largometraje de ficción, Mister Lonely, fue protagonizado por Diego Luna y fue muy bien recibido por el público local. Diego Luna interpretó en aquella ocasión el papel de un imitador de Michael Jackson que se enamora de una imitadora de Marilyn Monroe.
Además de dirigir películas, Harmony Korine es escritor y artista visual. Ha dirigido videos musicales para grupos como Sonic Youth, Cat Power y Bonnie Prince Billy; trabajando también de cerca con artistas de la talla de Bjork y Rita Ackermann.
Con TRASH HUMPERS, Korine traspasa las barreras formales y temáticas de sus anteriores trabajos, de por sí ya polémicos, demostrando una vez más su gran talento y audacia artística, que le han valido un importante lugar en la historia del cine contemporáneo.
Palabras del director:
“Recuerdo que cuando era niño había un grupo de ancianos que se reunían a pasar el rato en los callejones oscuros y debajo de los puentes cercanos a mi casa. Siempre estaban embriagándose y bailando. Una noche miré por la ventana de mi cuarto y vi a un grupo de estos ancianos fornicando con unos botes de basura y riéndose.
Parecían estar hablando un idioma extraño e inventado por ellos mismos. Esta
película es acerca de ellos.”